En el aeropuerto alquilamos un coche para poder movernos a nuestro aire. Debes saber que una vez recoges el coche te informan de una serie de seguros que recomiendan coger para evitar sustos, por lo que es probable que se encarezca un poco más de lo que tenías planeado.
Pasamos el día en Reikiavik. y Aparcamos el coche en la zona del puerto y contratamos un tour de avistamiento de ballenas. Después nos tomamos una buena sopa calentita y continuamos el día visitando la ciudad sin mover el coche, porque la ciudad es pequeña y se puede ir caminando. Puedes darte un bonito paseo si buscas la calle Skólavördustígur que sube hasta la iglesia luterana Hallgrimskirkja y bajando por el lago Tjönin a la derecha de la iglesia.
Para quitarnos el frío del avistamiento (fallido) de ballenas, fuimos a uno de los muchos baños termales que te encontrarás en Islandia, Laugarvatn Fontana, por cercanía a nuestro alojamiento. Si quieres conocer los baños más famosos tienes que ir a Blue Lagoon, están a 45 minutos de Reikiavik dirección suroeste.
¿Donde comer?
Te recomendamos que pruebes dos de los sitios más famosos de aquí:
Una sopa famosa en Ostabudin - https://goo.gl/maps/BhK4yNXnP5E2
Y el perrito caliente más famoso en Bæjarins Beztu Pylsur - https://goo.gl/maps/RzbLN2465tx
Día 2.- Círculo dorado.
Thingvellir National Park. Thingvellir está situado en un valle escarpado formado por la separación de dos placas tectónicas, la euroasiática y la norteamericana.
Valle de Haukadalur, donde verás Geysir (el más famoso pero extinto) y Strokkur
Finalmente Gullfoss, esta doble cascada es uno de los lugares más visitados de Islandia, parada imprescindible.
Día 3.- Landmannalaugar.
Uno de los lugares mágicos y que hace especial el viaje, es la región de las Tierras Altas de Islandia, donde las montañas se tiñen de colores amarillos, rojos y verdes y, donde puedes ver como respira la Tierra.
Aquí puedes hacer un trekking de un día por una de las rutas más bonitas y espectaculares del mundo.
Para llegar aquí hay que ponerle ganas y un poco de coraje si conduces tu mismo. En muchas páginas ni te recomiendan que vayas si no tienes mucha práctica. Las carreteras que te llevan solamente la pueden circular los todoterrenos, hay tres carreteras y la del norte es la "más fácil", pero tendrás que cruzar tres ríos, aunque mucha gente aparca el coche justo antes de cruzar el último río y continuan a pie.
Nosotros hicimos una ruta circular de 15km. Es la ruta "Skalli". Por el camino irás encontrando estacas con el color de la ruta que elijas. La nuestra era azul y de regreso la roja.
Día 4.-
Seljalandsfoss, una cascada de casi 60 metros, no es de las más famosas pero te encantará porque te puedes meter detrás y casi que el agua te caiga encima, así que te recomiendo que te pongas un buen chubasquero. Casi no te tienes que desviar de la carretera, así apuntalo y ¡refrescate!
Skógafoss. Una de las cascadas más grandes del país de unos 25 metros de ancho y 60 metros de caída. En cuanto sale el sol, podrás ver el arco iris.
Reynisfjall, es una reserva natural protegida, donde podrás ver cientos de aves, incluida al famoso frailecillo, el ave característica de Islandia.
Reynisfjara Beach y Halsenifs Hellir. Playa de arena negra, también verás una pared de columnas basálticas que recuerdan a la "calzada de los gigantes" de Irlanda.
Keldur, es una curiosa aldea vikinga de que le tejado de las casas está cubierto de césped. No es una parada obligada, pero tampoco te quitará mucho tiempo, es una aldea. Como curiosidad, antes de entrar en la aldea tienes que cruzar un río. En la orilla del río verás una casa pequeña de madera, originalmente estaba comunicada con la aldea y servía de como vía de escape.
Día 5.-
Solheimasandur Plane Wreck - el famoso avión de la segunda guerra mundial. Que es lo primero que hicimos para evitar las aglomeraciones, si quieres tener una foto sin gente. Eso sí, del parking al avión hay media hora de camino.
Svartifoss. Una de las cascadas más visitadas y populares de Islandia. La peculiaridad de esta cascada son las columnas hexagonales de piedra basáltica que la rodean dando un aspecto de órgano de catedral.
Svinafellsjokull. Glaciar muy cerca del Parque Nacional de Skaftafell.
Diamond Beach. En una playa de arena negra en la que tiene muchos pedazos de hielo que se desprenden del glaciar Vaknajokull. Algunos de estos trozos quedan varados en la orilla del mar, pareciendo trozos de diamante.
Eldhraun. De camino a Diamond Beach podrás ver campos de kilómetros y kilómetros de lava cubiertos de musgo. Es mucho más espectacular de lo que parece y muy curioso caminar por aquí y ver como se hundes tus pies en el musgo. También podrás ver Laufskálavarða y detenerte de nuevo a estirar las piernas y ver una gran llanura de lava cubierta de musgo en la que, desde hace cientos de años, la gente que pasa, apila unos montoncitos de piedras o cairn, y así tener suerte en su viaje.
Día 6.-
Acercándonos a Reikiavik para coger el avión de regreso puedes ir a:
Kerid Crater. Es uno de los muchos lagos que te encontrarás, pero está en el cráter de un volcán. Las rocas rojas contrastan con el verde de la vegetación y el azul intenso del agua.
Krýsuvík. Es un área geotérmica, uno de los muchos lugares donde respira de Tierra. Te encontrarás muchas fumarolas. No te dejará indiferente.
Si te sobran días te recomiendo la península Snaefellnes al noroeste de Reikiavik.